Una sopresa para mi amiga Ayessa. Le dejo follarse a mi marido (ella estaba enamorada, no lo sabía).

Una sopresa para mi amiga Ayessa. Le dejo follarse a mi marido (ella estaba enamorada, no lo sabía).

Ayessa apareció en nuestras vidas hace algo menos de dos años, sevillana como nosotros decidió venirse vivir a mi casa durante un tiempo para trabajar juntas la webcam. Yo notaba que siempre estaba pendiente de mi marido Tomy, con la mirada y sin decirme palabra se notaba que mi marido le ponía cachondísima pero no se atrevía a decirme nada por miedo a perder la amistad. Hasta que un día se lo pregunté: -Ayessa, ¿te pone cachonda mi marido, no paras de mirarlo?. Ella se sonrojó y no dudó en decirme muy seria -a los novios de las amigas se les respeta-. Bueno, un buen día le propuse hacer un vídeo porno -con un chico nuevo muy tímido- que no quería que la modelo la viese. Ella accedió a vendarse los ojos para hacer el casting al novato de turno y cuando la quitamos la venda... podréis ver la cara que puso cuando descubrió que era Tomy, su amor platónico, su polla prohibida la que le estaba follando. Las caras no mienten, son el espejo del alma. El resto del vídeo tendréis que descubrirlo vosotros. Un beso, Noa.